Butaca Crítica

Texto: Rosi Soto / Fotografía: Jose Alejandro Di Girogio/Rosi Soto
En agosto de 2008 culminó la temporada de la lucida y divertida pieza teatral "La Culpa es de mi bautizo", escrita y dirigida por Sandra I. con las actuaciones de Mariam Valero, Yulika Krauss, Adriana Romero y Veronica Arellano, la cual se presentó en el teatro Escena 8.
El argumento de la obra se basa en la historia de 4 mujeres que plantean cómo los nombres definen la personalidad de las personas, asegurando que las decisiones de vida están marcadas por el nombre con el cual fueron bautizados. A partir de allí se producen una serie de situaciones, que pasan por la mujer con dos amantes, por la mujer que es amante del hombre que no la valora y que nunca dejará a su esposa por ella y, finalmente por la mujer gay.
La trama hace énfasis en reflexiones de suma importancia, en como lo es la lealtad entre amigas la homofobia, el respeto por las preferencias sexuales de cada quien y la aceptación de las decisiones de los demás.
La escenografía representa pulcramente una sala bien acondicionada donde se prepara una fiesta sorpresa para Lesbia (interpretada por Adriana Romero), la hermana menor de Esmeralda Esperanza (Yulika Krausz). En esta reunión de intimas amigas, Alexandra (Verónica Arellano) incita a María (Mariam Valero) para que confiese que es gay. Secreto que ha mantenido oculto, siendo una gay de “closetla trama se agudiza cuando Esmeralda descubre que su hermanita menor Lesbia es la pareja de su mejor amiga María.
Preguntas como: ¿Realmente el nombre marca la personalidad? Se presenta sumamente argumentada, y entre secretos bien guardados y ahora develados, llantos, canciones de despecho y mucho, pero mucho humor, estas cuatro actrices trasladaron al público a la reflexión sobre este tema, entre risas, llantos, algunas sonrisas y canciones para recordar. Esmeralda Esperanza no puede dejar de lado la infidelidad ¿La culpa? Ese era el nombre de una tía infiel. Alexandra Emmanuel es la eterna amante, que sueña con casarse y tener hijos, aunque es considerada la mejor abogada de divorcios del país. María de las Angustias es la médico ginecólogo con más reputación en el ámbito médico. Y Lesbia, una mujer segura y capaz de desatar un complicado pero divertido enredo".
La producción de esta amena y bien interpretada obra estuvo cargo de Marian Valero. Sobresale la actuación de Verónica Avendallo, quien sale airosa de sus constantes improvisaciones. Esperamos verla de nuevo sobre las tablas caraqueñas y disfrutar de la madurez que le ha brindado su primera temporada.